100 km de Bezana, 30 ediciones y 25º campeonato de España
por Germán Marlasca
(4: 58 … 4:59… 5:00 am)Bip bip bip bip, bip bip bip bip, bip bip bip bip, eeeh?? Joé que temprano, me cagüen tó!!, aquí ya empiezan las primeras dudas…, quién me manda a mi apuntarme a estas cosas tan temprano!!! Venga un esfuerzo, el primero del día, además como siempre tengo hambre, lo primero a desayunar:
- 1 tazón de café
- 2 Sobaos (típicos de estas tierras cántabras)
- 2 Corbatas (idem)
- 10 galletas.
- 1 plátano.
- 1 manzana.
- Un racimito de uvas.
- Otro tazón de café.
- Una onza de chocolate.
Vaya vaya, sabía que de este desayuno me iba a acordar mucho rato de este día.
Me preparo rápido, ducha, ponerme las lentillas, esparadrapo en los pezones, culote y calzonas, camiseta técnica de la maratón de montaña galarleitz, (de hace 3 años), dorsal delante y detrás y corta vientos fino por si hacía fresco en el inicio de la carrera.
Salgo a las 6:05 para Bezana, estoy en Santander, son solo diez km por la autopista de Torrelavega, hay un control de alcoholemia, a la salida de Santander, (Jo que no me paren!, no porque dé si no por el tiempo, como empiecen a pedir papeles…, no llego, no llego…).
Llego sin novedad a Bezana, dejo la ropa para cambiarme al final en un vestuario de un pabellón polideportivo, y hago mi último ritual antes de cada prueba, esto puede sonar muy feo, y si se saca de contexto podréis reíros de mi hasta que os “jartéis” (soy andaluz), pero todo corredor de fondo, y de ultrafondo sabrá porque, me unto bien de vaselina los cachetes del culo, ¡Solo pa evitar rozaduras durante la carrera!!!
Pues nada, tras mi preparación, me voy a la salida, coincido con 5 ó 6 flipaos, que como yo ya he coincidido en varias carreras, vascos, valencianos y madrileños, pa los que correis el mapoma, el que va en el globo de 3:15, es un asiduo de estas carreras, un tio canijo y alto con unas piernas que dan miedo, de unos 45 ó 48 años, creo.
6: 58… 6:59… 7:00 Pom!!! A correr!!! Y las típicas bromas en grupo, ¡ánimo, que ya queda menos!!!
En esta foto no salgo, estaba por ahí detrás.
Decido ir tranquilote, de la mitad para tras, dicen que hemos empezado a correr unos 105, de un total de unos 160 inscritos, mi primer grupo es una brasileira, un portugués y dos valencianos experimentados, enseguida se une un grupo, con un conocido vasco, al que me he encontrado en 4 ó 5 pruebas de estas, un chaval bajito, pero con mucha experiencia, me uno a ellos, pero a ratos me quedo un poco atrás, creo que el ritmo es “fuerte”, pero siempre los tengo de referencia, y como no, corro con un mochilón de la leche, sí soy el único con mochila, y con mi corta vientos a la cintura, bueno lo de la mochila no lo digo de forma literal, es que el desayuno lo estuve digiriendo exactamente hasta el km 30, o sea casi tres horas de carrera, pero quizás no fue una mala opción, soy un poco ansioso y no regulo bien las fuerzas, de hecho, a partir del km 30 me encuentro muy bien, el estómago ya vacio y con fuerzas, empiezo a correr suelto, pasando gente, doblando alguno que otro y con la cabeza bien, quizás un poco eufórica por las sensaciones, las 6 primeras vueltas se me pasan rápido, el circuito tiene poco desniveles, y suaves, el más destacable es una subidita de 500 m en el km 6 de cada vuelta.
En cuanto a los avituallamientos, hay 2 en el circuito, uno casi en el km 5 y otro en el 9, es decir 2 por cada vuelta, en la primera vuelta no tomo nada, ni agua, el estomago lleno hasta los topes, en la segunda y tercera un poco de agua, y tragos cortos que el desayuno sigue ahí, a partir de la tercera vuelta, el avituallamiento consiste en 1 ó 2 vasitos de sales, tipo acuarius, y una botellita de agua para ir bebiendo poco a poco durante 2 km, también un poco de plátano y en las últimas vueltas un poco de sandia.
Esta debe ser mi paso por la sexta vuelta, mi cabeza empieza a comprender que he ido un poco más rápido de lo que debería.
A partir del la sexta vuelta, es decir del km 60, mi cabeza empieza a dudar, creo que este ritmo es un poco fuerte, solo me han doblado los tres o cuatro primeros, creo, que por cierto me doblaron otra vez, las piernas están bien, pero con 60 km en lo alto, empiezan a pedir otro ritmo más suave, en el 70 me pasa este amigo experimentado que os digo, como un rayo, me cagüen en to! Otra vez, tenía que haberme quedado en su grupo y regular fuerzas, ¡pero qué mas dá!, me auto animaba, he ido al ritmo que me pide el cuerpo, si hay que regular pues ahora lo haré, solo quedan 3 vueltas, 30 km, y sé que termino en menos de 11 horas, aunque creo que puedo conseguir mi objetivo, bajar de 10 horas.
Por cierto, muy importante, casi nunca me anima nadie, excepto en el triatlón de Guada que es la bomba, porque casi siempre voy solo a los eventos de carrera, pero esta vez me animaron unos familiares que tengo en Cantabria, y mi padre que es de allí y estaba ese fin de semana, me vieron en el km 60, 70 y a la llegada de los 100km.
Del 70 al 80 mis piernas empiezan a protestar, y me piden parar ya, yo empiezo a comer alguna pastilla de glucosa, que alivia mucho en estos casos, también decido tomar un ibuprofeno para anestesiar posibles dolores, sé que hay gente que no le parecerá bien esta opción, sentía una molestia en el empeine del pie izquierdo y no era de que llevaba el cordón demasiado apretado, me ha pasado muy rara vez pero bueno, el ibuprofeno fue mano de santo, como cuando sale el masajista y le echa agua vendita en la pierna al futbolista y se levanta y corre más que antes, yo creo que le deben de decir algo, una cosa así ( dice el mister que o te levantas y corres o vas a volver a jugar cuando el Real Betis vuelva a primera), sino no me lo explico.
Del 80 al 90 fue el peor rato, más de cabeza, se me hace interminable los 4 primeros km, es decir del 80 al 84, ya anduve alguna tachuela, y la mitad del repecho del km 6, y consigo llegar al km 90. Vamos 2 o 3 más o menos juntos, bueno a tramos, cuando uno anda otro se adelanta corriendo y así, ya ando más trozos y la rampita del km 6 me parece un muro, todo entero andando, pero ya estoy en el 97, miro el reloj, lo hago muy muy poco en las carreras, me guio por las sensaciones, quizás por eso regulo tan mal las fuerzas, pero soy así, aún no llevo 9 horas y media, seguro que bajo de 10 horas, a menos que me pille un coche, por cierto en la última vuelta me despido de todos los controladores y personal de apoyo, jodidillo pero mu feliz de no volver a pasar por allí más. En la meta una foto con el viejo antes de entrar en meta, y a pasar la línea, 9 horas 38 minutos 21 segundo.
Esta es la llegada, paré unos segundos para hacerme una foto con el cabeza de familia, el de rojo de la derecha es un primo, Enrique, y la rubia que está detrás de mi padre es la novia del de rojo, Virginia, detrás de ella un grupo de personas a los que no conozco pero que estuvieron allí, como veis no mucho público
Aquí cogiendo el correspondiente trofeo, y con un gran deseo de papear o engullir cualquier tipo de comida, mi tía, Loli, me tenía preparado unos macarrones con verduras y un churrasco que me supo a gloria.
La carrera en números:
por Germán Marlasca
(4: 58 … 4:59… 5:00 am)Bip bip bip bip, bip bip bip bip, bip bip bip bip, eeeh?? Joé que temprano, me cagüen tó!!, aquí ya empiezan las primeras dudas…, quién me manda a mi apuntarme a estas cosas tan temprano!!! Venga un esfuerzo, el primero del día, además como siempre tengo hambre, lo primero a desayunar:
- 1 tazón de café
- 2 Sobaos (típicos de estas tierras cántabras)
- 2 Corbatas (idem)
- 10 galletas.
- 1 plátano.
- 1 manzana.
- Un racimito de uvas.
- Otro tazón de café.
- Una onza de chocolate.
Vaya vaya, sabía que de este desayuno me iba a acordar mucho rato de este día.
Me preparo rápido, ducha, ponerme las lentillas, esparadrapo en los pezones, culote y calzonas, camiseta técnica de la maratón de montaña galarleitz, (de hace 3 años), dorsal delante y detrás y corta vientos fino por si hacía fresco en el inicio de la carrera.
Salgo a las 6:05 para Bezana, estoy en Santander, son solo diez km por la autopista de Torrelavega, hay un control de alcoholemia, a la salida de Santander, (Jo que no me paren!, no porque dé si no por el tiempo, como empiecen a pedir papeles…, no llego, no llego…).
Llego sin novedad a Bezana, dejo la ropa para cambiarme al final en un vestuario de un pabellón polideportivo, y hago mi último ritual antes de cada prueba, esto puede sonar muy feo, y si se saca de contexto podréis reíros de mi hasta que os “jartéis” (soy andaluz), pero todo corredor de fondo, y de ultrafondo sabrá porque, me unto bien de vaselina los cachetes del culo, ¡Solo pa evitar rozaduras durante la carrera!!!
Pues nada, tras mi preparación, me voy a la salida, coincido con 5 ó 6 flipaos, que como yo ya he coincidido en varias carreras, vascos, valencianos y madrileños, pa los que correis el mapoma, el que va en el globo de 3:15, es un asiduo de estas carreras, un tio canijo y alto con unas piernas que dan miedo, de unos 45 ó 48 años, creo.
6: 58… 6:59… 7:00 Pom!!! A correr!!! Y las típicas bromas en grupo, ¡ánimo, que ya queda menos!!!
En esta foto no salgo, estaba por ahí detrás.
Decido ir tranquilote, de la mitad para tras, dicen que hemos empezado a correr unos 105, de un total de unos 160 inscritos, mi primer grupo es una brasileira, un portugués y dos valencianos experimentados, enseguida se une un grupo, con un conocido vasco, al que me he encontrado en 4 ó 5 pruebas de estas, un chaval bajito, pero con mucha experiencia, me uno a ellos, pero a ratos me quedo un poco atrás, creo que el ritmo es “fuerte”, pero siempre los tengo de referencia, y como no, corro con un mochilón de la leche, sí soy el único con mochila, y con mi corta vientos a la cintura, bueno lo de la mochila no lo digo de forma literal, es que el desayuno lo estuve digiriendo exactamente hasta el km 30, o sea casi tres horas de carrera, pero quizás no fue una mala opción, soy un poco ansioso y no regulo bien las fuerzas, de hecho, a partir del km 30 me encuentro muy bien, el estómago ya vacio y con fuerzas, empiezo a correr suelto, pasando gente, doblando alguno que otro y con la cabeza bien, quizás un poco eufórica por las sensaciones, las 6 primeras vueltas se me pasan rápido, el circuito tiene poco desniveles, y suaves, el más destacable es una subidita de 500 m en el km 6 de cada vuelta.
En cuanto a los avituallamientos, hay 2 en el circuito, uno casi en el km 5 y otro en el 9, es decir 2 por cada vuelta, en la primera vuelta no tomo nada, ni agua, el estomago lleno hasta los topes, en la segunda y tercera un poco de agua, y tragos cortos que el desayuno sigue ahí, a partir de la tercera vuelta, el avituallamiento consiste en 1 ó 2 vasitos de sales, tipo acuarius, y una botellita de agua para ir bebiendo poco a poco durante 2 km, también un poco de plátano y en las últimas vueltas un poco de sandia.
Esta debe ser mi paso por la sexta vuelta, mi cabeza empieza a comprender que he ido un poco más rápido de lo que debería.
A partir del la sexta vuelta, es decir del km 60, mi cabeza empieza a dudar, creo que este ritmo es un poco fuerte, solo me han doblado los tres o cuatro primeros, creo, que por cierto me doblaron otra vez, las piernas están bien, pero con 60 km en lo alto, empiezan a pedir otro ritmo más suave, en el 70 me pasa este amigo experimentado que os digo, como un rayo, me cagüen en to! Otra vez, tenía que haberme quedado en su grupo y regular fuerzas, ¡pero qué mas dá!, me auto animaba, he ido al ritmo que me pide el cuerpo, si hay que regular pues ahora lo haré, solo quedan 3 vueltas, 30 km, y sé que termino en menos de 11 horas, aunque creo que puedo conseguir mi objetivo, bajar de 10 horas.
Por cierto, muy importante, casi nunca me anima nadie, excepto en el triatlón de Guada que es la bomba, porque casi siempre voy solo a los eventos de carrera, pero esta vez me animaron unos familiares que tengo en Cantabria, y mi padre que es de allí y estaba ese fin de semana, me vieron en el km 60, 70 y a la llegada de los 100km.
Del 70 al 80 mis piernas empiezan a protestar, y me piden parar ya, yo empiezo a comer alguna pastilla de glucosa, que alivia mucho en estos casos, también decido tomar un ibuprofeno para anestesiar posibles dolores, sé que hay gente que no le parecerá bien esta opción, sentía una molestia en el empeine del pie izquierdo y no era de que llevaba el cordón demasiado apretado, me ha pasado muy rara vez pero bueno, el ibuprofeno fue mano de santo, como cuando sale el masajista y le echa agua vendita en la pierna al futbolista y se levanta y corre más que antes, yo creo que le deben de decir algo, una cosa así ( dice el mister que o te levantas y corres o vas a volver a jugar cuando el Real Betis vuelva a primera), sino no me lo explico.
Del 80 al 90 fue el peor rato, más de cabeza, se me hace interminable los 4 primeros km, es decir del 80 al 84, ya anduve alguna tachuela, y la mitad del repecho del km 6, y consigo llegar al km 90. Vamos 2 o 3 más o menos juntos, bueno a tramos, cuando uno anda otro se adelanta corriendo y así, ya ando más trozos y la rampita del km 6 me parece un muro, todo entero andando, pero ya estoy en el 97, miro el reloj, lo hago muy muy poco en las carreras, me guio por las sensaciones, quizás por eso regulo tan mal las fuerzas, pero soy así, aún no llevo 9 horas y media, seguro que bajo de 10 horas, a menos que me pille un coche, por cierto en la última vuelta me despido de todos los controladores y personal de apoyo, jodidillo pero mu feliz de no volver a pasar por allí más. En la meta una foto con el viejo antes de entrar en meta, y a pasar la línea, 9 horas 38 minutos 21 segundo.
Esta es la llegada, paré unos segundos para hacerme una foto con el cabeza de familia, el de rojo de la derecha es un primo, Enrique, y la rubia que está detrás de mi padre es la novia del de rojo, Virginia, detrás de ella un grupo de personas a los que no conozco pero que estuvieron allí, como veis no mucho público
Aquí cogiendo el correspondiente trofeo, y con un gran deseo de papear o engullir cualquier tipo de comida, mi tía, Loli, me tenía preparado unos macarrones con verduras y un churrasco que me supo a gloria.
La carrera en números: